El consumo de la leche y sus derivados, como quesos, cremas y yogures, puede traer beneficios para quienes los consumen, dadas sus propiedades para el fortalecimiento del sistema óseo, de acuerdo con la Cámara Nacional de Industriales de la Leche (CANILEC).
La osteoporosis es una de las enfermedades que más aquejan a la población mexicana y consiste en una disminución considerable de la cantidad de minerales en los huesos por un déficit en la absorción de calcio. Esta enfermedad, una vez detectada no tiene cura, pero si se puede controlar.
Es evidente que los años más importantes para construir la masa ósea son durante la infancia y adolescencia. Es en esta etapa en la cual se forman los huesos con mayor rapidez, ocasionando que los huesos se tornen más grandes y densos. Este ritmo se mantiene hasta aproximadamente los 20 años, momento en el cual normalmente se alcanza el pico máximo de masa ósea.
De acuerdo con el nutriólogo Enrique Elías, miembro del comité científico de la Campaña “Toma un Buen Consejo”, una dieta que incluya tres porciones de leche o sus derivados, en combinación con una alimentación rica en fósforo y vitamina D, ayuda al mejor desarrollo de los huesos en la etapa de crecimiento.
“La leche es uno de los alimentos con mayor concentración de calcio, por lo que es un gran aliado en la formación del sistema óseo, no sólo en el ciclo formativo, sino a lo largo de las distintas etapas de la vida”, comenta.
El experto en alimentación, manifiesta que esta dieta debe ser complementada con una rutina de ejercicio que ayude a la formación del hueso. Además, expone que la industria alimentaria cuenta actualmente con una diversidad de productos lácteos diseñados para aquellas personas que tengan intolerancia a la lactosa, por lo que al consumir estos productos deslactosados se obtienen todas las propiedades de la leche que ayudan a tener huesos más sanos.
Fuente: Cámara Nacional de Industriales de la Leche (CANILEC).